500 g de harina

250 g de azúcar

2 huevos

150 ml de leche

100 ml de anís

1 sobre de levadura

Ralladura de limón

100 ml de aceite de oliva virgen con Denominación de Origen Estepa

En un cuenco de buen tamaño batimos bien los huevos con las varillas. Seguidamente incorporamos el azúcar y la leche y batimos hasta conseguir una mezcla homogénea.

Añadimos el aceite de oliva virgen extra, el anís y el limón. Emulsionamos bien la mezcla.

Añadimos la harina y la levadura sin dejar de batir hasta que, poco a poco, la masa adopte la consistencia óptima para poder proceder al amasado.

Procesamos hasta conseguir que la masa no se pegue a las manos y a la superficie de la mesa. La dejamos reposar durante 30 minutos en un cuenco cubierto con un paño de cocina.

En una sartén echamos el aceite de oliva virgen extra. Freímos una cáscara de limón para templar la intensidad del aceite. Hacemos pequeñas bolas con la masa. Estiramos y le damos forma de rosquilla. Freímos en AOVE por tandas a temperatura media para que se cueza el interior.

Cuando estén doradas sacamos y colocamos sobre papel absorbente. Espolvoreamos con azúcar glas.