¼ l de agua

250 g de harina

Cáscara de 1 limón

½ cucharada de sal

Aceite de oliva virgen extra con Denominación de Origen Estepa

Azúcar y/o canela molida para servir

Calentamos el agua en un cazo junto con la cáscara de limón. Mientras, tamizamos la harina con un colador sobre un cuenco de buenas dimensiones. A continuación damos forma de volcán a la harina dejando un hueco en el centro.

Cuando el agua rompa a hervir retiramos la cáscara de limón, incorporamos la sal y vertemos sobre la harina de golpe. Removemos con cuchara de madera o varilla hasta obtener una masa compacta y lisa, sin grumos.

Dejamos reposar en un lugar fresco tapado con un paño de cocina.

Introducimos la masa en la churrera con la boquilla en forma de estrella, o en una manga pastelera. Hacemos tiras alargadas. Cortamos la masa en tiras de unos 15 cms y unimos los extremos apretando con los dedos para darles forma de rosca.

Calentamos a 180 grados el aceite de oliva virgen extra en un recipiente, con suficiente fondo para que los churros “respiren”, y freímos dándoles vueltas hasta que queden dorados. Escurrimos sobre papel absorbente y servimos inmediatamente, espolvoreados de azúcar o canela en polvo.